drossera

Todos los grandes hombres del mundo han sido un poco locos, locos ante los ojos de la masa. Su locura residía en que no eran desgraciados, no sufrían de ansiedad, no temían a la muerte, no se preocupaban por trivialidades. Vivían cada momento con totalidad e intensidad, y a causa de esta totalidad e intensidad, su vida se convirtió en una hermosa flor, estaban llenos de fragancia, amor, vida y risa. Pero esto hiere a los millones de personas que te rodean. No pueden aceptar la idea de que hayas conseguido algo que ellos no lograron; intentarán de todas las formas convertirte en un miserable. Su condena no es más que un esfuerzo por hacerte infeliz, por destruir tu danza, por arrebatarte tu alegría, para que así, puedas volver al rebaño.

Uno tiene que armarse de valor, y si la gente dice que estás loco, disfruta de la idea. Diles: "Tienes razón; en este mundo, sólo la gente loca puede ser feliz y alegre. Yo he elegido la locura con alegría, felicidad, y danza; vosotros habéis elegido la cordura con infelicidad, angustia e infierno. Nuestras elecciones son diferentes. Sed cuerdos y seguid siendo miserables; dejadme solo con mi locura. No os ofendáis; yo no me siento ofendido por todos vosotros; tanta gente cuerda en el mundo y yo no me siento ofendido".

Es cuestión de muy poco tiempo... Una vez que te hayan aceptado como loco, ya no te molestarán; entonces podrás salir a plena luz con tu auténtico ser, podrás abandonar todas tus falsedades.Toda nuestra educación crea una división en nuestra mente. Tenemos que mostrar una cara ante la sociedad—ante la masa, ante el mundo—que no es necesariamente nuestra verdadera cara; de hecho, no debe serlo. Tienes que mostrar la cara que la gente aprecia, la que gusta a la gente, la que es aceptable para ellos, para sus ideologías y sus tradiciones; y debes guardar para ti mismo tu rostro original.


Osho

http://www.oshogulaab.com/


Vídeos / Música

Blog

Galería